N/A: De ahora en adelante, se indicará quién narra la parte del capítulo con su nombre en cursiva. Espero que os guste e intentaré actualizar más seguido a partir de ahora :)
Elva Valles
No podía creerme que mis padres
hubieran dicho que sí. Aunque mi madre se hubiera empeñado en venir conmigo en
el viaje, me daba igual.
Estaba en el avión Madrid-Múnich,
sentada en una fila con mi madre y Javi, y Valeria se había sentado en la de
detrás con Joachim y Marlon, alegando que Marlon le estaba “enseñando alemán”.
Mi madre había quedado rendida al entrar por la puerta, pero yo me dispuse a
hablar con Javi. Tenía algo que decirle.
-Y entonces se puso delante del
otro, le pegó una patada al balón, y chaval, salió despedido, el portero se
quedó flipando, ni siquiera se movió de donde estaba y...
Solo entonces me di cuenta de que
me estaba hablando.
-Javi-le interrumpí. Él se calló
y me miró, acercándose hasta quedar muy cerca de mí. Tomé aire y la pregunta
salió de mi boca sin pensar.- ¿Desde cuando te gusta Valeria?
Él me miró, incrédulo, con los
ojos muy abiertos, y se separó de mí. Se irguió en su asiento y no habló hasta pasados
unos segundos.
-¿Tanto se me nota?-preguntó, y
se echó a reír. Yo lo seguí.
-En serio. Dudo que ella se haya
dado cuenta, Javi, pero yo sí.
-Me conoces mejor que yo
mismo.-replicó él, cogiéndome de la mano.
-Ahora de verdad, Javi. ¿Desde
cuando?-pregunté de nuevo. Él se lo pensó.
-Supongo que desde siempre. Pero
me di cuenta solo hace unos meses.
Recibió un golpe con la revista
que estaba en el bolsillo del asiento de delante de mí.
-¿Y no me lo contaste?-dije,
fingiendo indignación.
-Me parecía contraproducente.-
otro golpe que hizo que mi madre se revolviera en su asiento. Después, nuestras
risas hizo que finalmente se despertara y nos mirara con mala cara para después
ponerse los auriculares y cerrar los ojos de nuevo.
-¿Y ella qué?-me preguntó Javi.
-No lo sé. Ya sabes como es
Valeria. El único chico del que me ha admitido estar enamorada fue Marlon Wessel.
Javi echó un vistazo a los
asientos de detrás, donde los tres ocupantes charlaban animadamente, aunque no
en alemán. Volvió la vista al frente y resopló.
Valeria Vailati
Marlon había cambiado desde la
última película de las Fieras. La había visto tantas veces con Elva que me
había aprendido sus rasgos de memoria, pero ahora estaba más alto aún, más
delgado, y más moreno. Llevaba el pelo muy corto y tenía un tatuaje en el
brazo. Y estaba a escasos centímetros de mí. Lo podía tocar si quisiera. ¡Lo
podía tocar! Calma Valeria, ya me estaba sobresaltando. Llevaba tres minutos
hablándome de los rodajes cuando me di cuenta de que no había escuchado ni una
palabra. Era mi amor platónico, el amor de mi infancia. Y no me podía creer que
estuviera allí.
-Valeria-me dijo de repente,
devolviéndome a la realidad. Lo miré con una sonrisa.- Te estaba diciendo que
si has estado alguna vez en Alemania.
-Sí-le respondí.-Mi padre tiene
familia en Alemania. Bueno, mi madre es italiana y mi padre alemán, pero
siempre vivimos en España.
-¿Has visitado alguna vez Starnberg?-me
preguntó, devolviéndome la sonrisa. No tenía una sonrisa de anuncio, pero sus
ojos sonreían más aún que sus labios. En los pocos días que habíamos pasado
juntos, en Nueva York, en Oviedo, y en Madrid, a cada día me gustaba más que el
anterior. Me di cuenta de que eran de un color muy parecido al de Javi,
aquellos ojos en los que me había perdido tantas veces... Era irónico que el
chico que me gustaba tuviera los mismos ojos que mi amor platónico.
-No-le respondí cuando volví a
ser consciente de mí misma. Podía ver a Javi y a Elva hablando delante de mí,
pero no se oía nada de lo que decían. Había una razón por la que no le había
dicho nunca nada de eso a mi mejor amiga, y era que yo creía que Javier estaba
enamorado de ella. Aunque aquello había cambiado hacía unos meses, cuando él
había empezado a pasar más tiempo conmigo que con ella. Ahí me di cuenta de que
lo quería mucho, pero como amigo y nada más. Y dudaba que él pensara algo más
de mí.- ¿Por qué?
-Porque ahí es a donde vamos-me
respondió Joachim en vez de Marlon. Volví la vista hacia él. – Es precioso. Os
va a encantar- añadió guiñándome un ojo.
Elva Valles
Miré por la ventanilla hasta el
momento que aterrizamos. Después, salí corriendo, arrastrando a mi madre y a Javi
por el pasillo hasta salir del avión. Nos seguían Joachim, Valeria y Marlon.
Tenía unas ganas de llegar a la sala de espera... Por coger mi maleta, claro.
No porque Leon Wessel estuviera esperándonos al otro lado. Para nada.
Vi la sonrisa que tenía Valeria
pintada en la cara mientras hablaba con Marlon y no podía augurar nada bueno.
Al menos para Javi. Recorrimos entre gritos y risas los pasillos del aeropuerto
de Múnich hasta llegar a las cintas de las maletas tarde porque varias personas
nos reconocieron a mí, a Joachim y a Marlon. Afortunadamente, las maletas no
eran grandes, pues ya compraríamos allí cosas, y no habían sufrido ningún daño.
-Vamos al baño, El.-me dijo
Valeria. Le eché una mirada de reproche.- ¿Qué?
-Que tu ya hayas conocido a tu
príncipe azul no significa que yo haya conocido al mío-señalé las puertas
correderas y opacas que había al otro lado de la sala-. Tras esas puertas está
el mío.
-Y... no puedes esperar. Vale,
pero si te meas encima de la emoción, no es mi culpa.-le di un beso en la
mejilla y fui a reunirme con el resto mientras Valeria corría a los baños.
Cuando me di cuenta de que debería ir a mirarme al espejo, ya estábamos a cinco
metros de la puerta y se acababa de abrir para dejarnos pasar. Al otro lado
había una gran cristalera que dejaba ver el cielo azul de Múnich, las pistas de
aterrizaje y, al fondo, un gran bosque.
Al principio no lo vi. Estaba
sentado en el banco con Kevin, y delante de ellos estaban Jimi y Sarah, por lo
que lo ocultaban. Pero cuando Sarah corrió a abrazar a Marlon, dejó al
descubierto a un chico rubio, que se levantó para venir a saludarnos. El
corazón me dio un vuelco.
Había crecido muchísimo, pero no
tanto como su hermano. Era más ancho que él y musculoso, y tenía el pelo rubio
un poco largo. Tenía la misma cara de siempre, los mismos ojos marrones que me
habían conquistado cuando tenía doce años. La verdad era que no podía haber
tenido mejor regalo de cumpleaños adelantado.
Solo habían venido ellos cuatro: Leon,
Kevin, Sarah y Jimi, porque el resto estaba en el sitio a donde íbamos a ir a
rodar la película, el cual no me habían querido decir. Pero a mí me bastaba. Me
quedé junto a mi madre, Valeria y Javi, mientras todos se saludaban, un poco
cortada. Pero en seguida vino Sarah a hablar con nosotros. Se presentó, aunque
los cuatro sabíamos su nombre (Valeria y yo porque éramos fans de Vanessa, mi
madre de tanto oír hablar de ello en casa, y Javi porque era la única chica), y
luego dijo que era una gran admiradora de mi libro y que no podía esperar a la
traducción al alemán, así que se lo había leído cinco veces en inglés. Sonreí y
me dio un abrazo, pero la verdad era que yo estaba ausente. Mi mirada y mi
mente estaban fijos en el chico rubio que abrazaba a su padre.
Después vino Kevin, y después
Jimi, los dos muy majos. Ya a los cinco minutos de conocernos estábamos riendo.
Envidié en silencio a mi madre cuando dijo que se iba a hablar con Joachim y vi
desde lejos cómo le presentaba a Leon. Era el único que faltaba.
-¡Elva!-me llamó mi madre de
repente. Tan oportuna como siempre. Solo le faltaba decir “Ven a conocer a este
chico tan guapo”, como siempre había hecho cuando era pequeña. Menos mal que Leon
no hablaba español. O al menos eso era lo que yo tenía entendido.
-¿Sí?-me giré, y dije con la voz
más falsa que pude hacer en ese momento. Sentí mis mejillas arder en el momento
en que sus ojos se posaron en mí. Sonrió tímidamente.
-¡Ven!- se limitó a decir mi
madre. Me aproximé, mirando al suelo, y la odié eternamente cuando en el último
momento se separó de Marlon y Leon con Joachim, yendo hacia un mostrador de
información. Menos mal que se iba a quedar cinco días en Múnich y luego vuelta
a casa a “cuidar” de mi hermano Raúl. Como si un chico de veinte años como él
lo necesitara.
Cuando llegué, miré a Marlon
intentando que no se me notara el rojo de las mejillas. Me di cuenta de que
Valeria y Javi me habían seguido. Intenté sonreír, aparentando tranquilidad.
-Elva- le agradecí eternamente a
Marlon ese gesto-, este es mi hermano Leon.
Me giré para quedar de frente a
él y me tuve que contener para no empezar a escanear su cara. Él sonrió más
anchamente. Yo sonreí. Un calor inhumano me invadió el cuerpo cuando se acercó
a mí tímidamente y me dio un beso en cada mejilla, como solo se hacía en
España, demasiado cerca de la boca y demasiado lejos de lo que se conoce por
“mejillas”. Sentí arder ahí donde me había besado.
-Encantada-murmuré, sin perder la
sonrisa.
-Igualmente-me respondió. Su voz
sí que había cambiado. No era para nada la voz que se escuchaba en la última
película, aún infantil. Normal, habían pasado cuatro años. Era grave pero sin
pasarse, con un fuerte acento al hablar en inglés que ni Marlon ni Joachim
habrían conseguido aún intentándolo. Me enamoré perdidamente de su voz con tan
solo una palabra.
Con el corazón aún en la
garganta, me giré para presentarle a mis amigos, pero Valeria me ahorró el trago
autopresentándose. Genial, todo iba sobre ruedas. Excepto aquel maldito rojo
que no se iba de mis mejillas. Y no se me fue hasta que montamos en coches
separados cinco minutos después, pero volvió cuando Marlon anunció que
pasaríamos la noche en su casa.
N/A: si en algún momento leéis Elisa en vez de Elva, lo siento, es que Elisa es mi nombre y a veces se me olvida que en esta historia se llama Elva :))
N/A: si en algún momento leéis Elisa en vez de Elva, lo siento, es que Elisa es mi nombre y a veces se me olvida que en esta historia se llama Elva :))
Hola(: Soy superfan de las fieras futbol club,y queria saber si en verdad han sacado/van a sacar una sexta pelicula,ojala. Gracias♥
ResponderEliminarPor desgracia, de momento no tienen planeado sacar una sexta, aunque hubo algún proyecto que nunca se llevó a cabo. Yo simplemente creé esta historia por eso, para que se vea que siempre estamos aquí los fans :) Muchas gracias por tu comentario, un abrazo :)
EliminarQue pena... Y sabes si los libros estan en España? Supongo que si,pero despues de tanto tiempo,no creo que los sigan vendiendo.. Gracias a ti por contestar. Me encanta la novela,sigue así :)
ResponderEliminarEs probable que sí los sigan vendiendo, igual no en todas las librerías, pero fijo que en algunas bibliotecas infantiles los tienen, yo los leí así :) Ah, y no sé si lo sabrás, pero están preparando una serie de televisión en Alemania de dibujos animados de todos los libros, ojalá la tradujesen al español...
EliminarMe alegro mucho de que te guste, un abrazo,
Elisa :)
Miré en la biblioteca de mi ciudad y los van a poner el dia 19 asi que gracias!
EliminarEnserio? Espero que lo pongan en español o al menos que este subtitulado. Sabes como se llama? Es que he buscado die wilden kerle dibujos animadosy no me sale nada... Muchisimas gracias!
Me alegro! Yo voy a ver si saco algo de tiempo y los vuelvo a leer...
EliminarEstuve buscando y te paso la página del imdb en inglés, tampoco hay mucha información, me parece que ya está acabada, pero no sé, a ver si la encuentro online, aunque esté en alemán, alguna palabra suelta aprenderé jajajaja
http://www.imdb.com/title/tt2335083/?ref_=fn_al_tt_2
Un beso y gracias a ti :)))